lunes, 27 de julio de 2015

ESPERANDO A LOS OTROS


    Esta es mi reflexión luego de leer el texto ESPERANDO A LOS OTROS, de la autora Juana M. Sancho Gil . Si usted desea ver el texto completo pique en el siguiente enlace 

    El sistema educativo actual espera que el estudiante llegue educado y dócil, para que la escuela pueda enseñar. Este concepto equivocado lleva al docente a instaurar la cultura de la queja, esperando un alumno que no va allegar nunca.

    Al docente se lo ha formado para enseñar una asignatura, para transmitir sus conocimientos y lograr que los estudiantes aprendan. El éxito escolar deriva de la educación familiar, y el entorno social y cultural del alumno. La escuela "enseña", la familia "educa". 

    Este discurso es altamente peligroso, ya que las escuelas " esperaban a otros alumnos" y los que llegaban no sabían aprender lo que ellos le enseñaban. El estudiante vive en un mundo muy estimulado, sobrecargado de información de todo tipo y lo que la escuela le brinda lo aburre. El ser humano ha cambiado, por ende, la escuela no puede seguir funcionando sin someterse a variaciones y reformulaciones. Su reetructuración no solo es necesaria, sino también urgente. 

    Los docentes deben dejar de esperar a los "otros" alumnos y aceptar que el tipo de alumno actual, no es el mismo, que hace 20 o 30 años atrás, por lo tanto, si se quiere una educación eficiente y eficaz, no se pueden ignorar las características del alumno que se enfrenta actualmente, y de acuerdo a sus intereses y particularidades es que se debe adecuar los métodos de la enseñanza, de lo contrario, el aprendizaje sera poco efectivo o nulo. 

viernes, 24 de julio de 2015

MI RECORRIDO POR EL INSTITUTO

MI RECORRIDO POR EL INSTITUTO

En el año 2013, comencé con mucho entusiasmo el Profesorado en Administración. Recordando un poco de mi trayectoria en estos dos años
de cursado, recuerdo que el primer día de clases fue en un salón grande, donde nos encontrábamos todos los alumnos de todas las carreras, hicimos una actividad en grupo y ahí conocí a mis futuros compañeros.
  El primer año fue un poco difícil, debido a que vimos nuevos contenidos que nunca había trabajado, ni tenía idea de ellos, pero luego me fui acostumbrando y entusiasmando.
  Se formó un grupo muy lindo y numeroso, en mi caso los veía poco, ya que como homologue varias materias me disminuyo mucho la carga horaria del cursado y venia pocos días, pero igual de todas maneras me integre bien en el grupo.
  Con el transcurso de los meses el grupo fue disminuyendo, ya que después de las vacaciones de invierno abandonaron casi la mitad.
  MI primer año fue bueno, pero un poco confuso y pesado debido a que el contenido de las materias pedagógicas era muy nuevo pero a la vez interesante. A pesar de todo aprendí y me gustó mucho. 
  El comienzo de segundo año fue diferente, éramos un grupo reducido, y lo que más me asustaba y preocupaba era el primer contacto con los alumnos en las escuelas. Cuando me toco comenzar a observar en el primer cuatrimestre, el primer día estaba intrigada porque no sabía cómo iba a ser el curso o lo que iba a pasar; tenía miedo. Con el paso de los días me adapte, me acostumbre y la pasaba bien. Los dos grupos a los que observe eran muy lindos. El grupo humano era muy cálido, me aceptaron enseguida y tuve muy buena relación con los profesores, eso me ayudo a que me adaptara fácilmente y no tuviera problemas.

  A pesar de que me daba miedo ir a los colegios fue una experiencia muy linda y divertida. También aprendí mucho ya que pude poner en práctica lo que veía en clase.